La persona es un misterio; nunca se sabe que reacción podrá tener, aun así parece que conocemos muy bien y al final un día te sorprende algo nuevo. Pues, parece ser que nadie es perfecto, aunque mucha gente lo quiera ser. Ser perfecto no es nada bueno, al fin y al cabo llevarias una vida totalmente agobiante y amargada.
Por otro lado está la persona que quiere y necesita libertad. Esa persona que vive y también deja vivir. Nos encerramos en nuestros problemas (Pues todos los tenemos) y no queremos ver más, por miedo? No creo; Por cobardía? Seguramente. Sin embargo, esos espíritus libres que gozan y exprimen esa vida hasta el final son los que al final resultan totalmente perfectos, sin necesidad de fingir, ni elevarse hasta lo más alto.
Luego existe el resto del mundo, una mezcla entre los liberales y los perfectos, convirtiendose en semiliberales y semiperfectos. Y ahora nos preguntamos: quienes serán esos? Pues resulta ser, que esos son las personas normales, gente de a pie. Esa muchedumbre mayoritaria que se busca su vida y abandona lo que sea y lucha para sacar hacia delante a su gente. Se ve mucho ahora en estos tiempos la influencia de este tipo de persona. Es la que sufre, es la que llora, es la que canta, es la que espera, es la que cree, son las únicas que sin saberlo mantienen esa fé, muy necesaria para sobrevivir.
Pues si, todos somos. Necesitamos buscar soluciones. Necesitamos afrontar nuestra vida. No somos perfectos, y para qué?
